¿PUEDE HABER TRANSFORMACIÓN SIN CONSCIENCIA?



Noah Harari*, en su libro "Sapiens" (2011), nos habla del momento histórico en que se produjo la Revolución Agrícola: hace 12.000 años. Queda descrita como una época en que se dió un gran salto evolutivo sin ganancia plena, ya que comportó también renuncias respecto de la era de la caza y la recolección. Por ejemplo, quedó mermado el aporte alimenticio entre la población, al disminuir la variedad de alimentos: el cultivo se redujo prácticamente a los cereales. El número de moradores y el nivel de enfermedades se incrementaron. También ascendieron los grados de inseguridad, porque había "cosas" que defender: un territorio, rebaños, una casa... Parece ser que "el ego" de una persona encontró terreno abonado, comenzando ella a identificarse y definirse por sus "posesiones", algo que se aceptó también socialmente.

Sea como fuere, una cuestión interesante es si cada elección se hizo desde la consciencia plena (darse cuenta de...) a propósito de cuánta era la ganancia y cual era la pérdida en cada decisión tomada. Pero, ¿cultivamos esa consciencia ahora, miles de años después?

Lo que sí parece estar claro es que de ahí venimos, y que parte de ese "inconsciente colectivo", como diría Jung**, es el que hemos heredado. Seguimos siendo "sapiens" decididos en su mayoría a "cultivar" otras cosas, por ejemplo, "nuevas tecnologías" sin querer observar el precio que pagamos: a nivel de pérdida de planeta verde y azul, de la desigualdad y abuso creciente hacia las personas, niñ@s, que extraen el coltán... Sin buscar ecuanimidad ni equilibrios... Más bien, con el piloto automático como centro de decisiones... Al mismo tiempo se deprecian el cultivo de la tierra y sus frutos, a juzgar por el valor otorgado socialmente a la excelencia tecnológica frente a la poca valoración de quien siembra y recoge la labranza, o de quien sabe de cuidados hacia otr@s... La transformación social se continúa haciendo acrecentando las distancias económicas entre unas personas y otras... El desarrollo evolutivo lo seguimos basando en un incremento de bienes materiales que no alcanza para tod@s... El "ego" personal se sigue identificando con "cosas" que poseemos o nos parece poseer...

Nuestro modelo social es consumista e individualista por encima de otros aspectos y capacidades humanas, también cultivables, como la consciencia, el silencio, la bondad, la empatía con compromiso que permite aliviar el sufrimiento propio o ajeno...

Durkheim*** afirmaba que la consciencia colectiva es una realidad suigéneris, donde el todo es más que la suma de las partes. Sin embargo, la suma de las partes también cuenta, así que cada parte es también significativa. Cada persona tenemos un grado de responsabilidad en la propia transformación personal y social y hacia dónde la dirigimos. No vale considerar que es solo el cambio social el que guía los procesos personales en exclusiva. Merece la pena aprender de los errores: los personales y los sociales. Es un dicho popular el de que "el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra". Solo que "el hombre" muere y la piedra queda. Tal vez el tropiezo se haya repetido durante milenios sin darnos cuenta.

El "inconsciente colectivo" viaja instalado en cada un@ de nosotr@s. También incorporamos la propia historia personal, en forma de diferentes heridas, mecanismos de defensa, límites naturalmente humanos etc, sobre los que no siempre somos conscientes... ¿Manejamos todo eso, o ello nos maneja cuando hay inconsciencia? El auto-conocimiento se muestra como una herramienta básica para la transformación personal y colectiva. No puede haber cambio profundo sin auto-conocimiento y consciencia: son como la seda que envuelve a la oruga hasta que se convierte en mariposa... pero es la propia oruga quien fabrica la seda, buscando la metamorfosis...

Tal vez estemos en los umbrales de la "Revolución Consciente" y por eso se haga notar especialmente una crisis que afecta a numerosas áreas humanas, desde la personal a la social, desde la económica hasta qué tipo de valores deseamos cultivar... Necesitamos introspección, escucha propia y hacia "el otro", empatía implicada, nos es preciso cultivar la consciencia personal y la colectiva... para poder realmente elegir e ir creciendo en esa libertad auténtica, que tanto nos gusta nombrar.

* Yuval Noah Harari: Historiador, profesor y escritor israelí (1976). Sapiens. Una breu història de la humanitat, 2014, Barcelona: Edicions 62
** Carl Gustav Jung: Psiquiatra, psicólogo y ensayista suizo (1875-1961). Instinto e inconsciente1(919)
*** Émile Durkheim: Psicólogo y filósofo francés (1858-1917). Les règles de la méthode sociologique (1895)

Comentaris

Entrades populars d'aquest blog

L'ALÈ NOSTRE DE CADA DIA

EMPATÍA + COMPROMÍS *COMPASSIÓ (II)

CONCIENCIA Y VIDA